Es bueno volver la mirada a las raíces de los encuentros que dan origen a procesos de cambio como lo ha hecho REPAM en estos 7 años de vida.
Parece que era ayer cuando en la ciudad de Puyo del 22 al 24 de abril del 2013 se reunían en el Centro Pastoral de Intipungo, un encuentro de 146 personas convocados por una experiencia de trabajo compartido en el Oriente Ecuatoriano y coordinado por la Caritas Nacional del Ecuador, acompañados por las principales autoridades de la Conferencia Episcopal del Ecuador, los obispos de las jurisdicciones amazónicas del Ecuador, el representante del CELAM Mons. Pedro Barreto ,y representantes de los pueblos originarios de la Amazonia y ademas organizaciones fraternas internacionales, nos reuníamos para a la luz de un proceso de trabajo y reflexión que se ha venido realizando en la Amazonia ecuatoriana, buscar respuestas y caminos para promover un modo de vida compatible con la defensa de la naturaleza de nuestra Amazonia y de los pueblos que en ella habitan.
El llamado que el Papa Francisco había hecho en una homilía el 19 de marzo del 2013: “Quisiera pedir por favor a todos los que ocupan puestos de responsabilidad…hombres y mujeres de buena voluntad: seamos custodios de la creación, del designio de Dios inscrito en la naturaleza, guardianes del otro, del medio ambiente, no dejemos que los signos de destrucción y de muerte acompañen nuestro caminar…”
Todo ello motivó a los presentes a elaborar un documento final de este encuentro y asi sembrar la semilla de una Red llamada REPAM, que al año siguiente 2014 en Brasilia se diera luz al nacimiento oficial de la REPAM como fruto de un proceso de trabajo en distintos países amazónicos con la misma búsqueda de encontrar el cauce que articule tantos pensamientos y sentimientos expresados en las voces de los pueblos que viven en los territorios de este bioma pan amazónico.
Dios padre y madre, con su Espiritu fecundo y creativo, hizo surgir este instrumento providente de la REPAM y después a la luz de la encíclica Laudato Si del Papa Francisco, quien movido por el Espíritu de Dios, convocaría el Sínodo Amazónico, algo que nadie se imaginaba, donde la REPAM realizó un trabajo gigantesco encomendado por el Papa, la preparación y la ejecución de la escucha en los territorios amazónicos con una participación inédita, de más de 86.000 participaciones, preludio de una Iglesia sinodal, referente de trabajo eclesial en el mundo, y que ha sido y es el Kairós del espíritu en la Iglesia hoy , para abrir nuevos caminos de evangelización y para vivir una ecología integral en defensa y cuidado de la vida de nuestro planeta tierra, casa común para la humanidad.
La REPAM ha estado presente y seguirá estando presente en el territorio acompañando la vida de la familia amazónica, con su gente, con su fauna y con su flora con sus montañas y ríos, expresión del amor y la hermosura creada por Dios para el mundo.
Agradecemos a Dios por estos 7 años de camino andado , de lucha y de desafíos, de esperanzas y sueños realizados. Seguimos soñando como nos pide el Papa Francisco en su Querida Amazonia.” SUEÑO CON UNA AMAZONIA, que luche por los derechos de los mas pobres, ..que preserve esa riqueza cultural…que custodie celosamente la hermosura natural que la engalana , sueño con comunidades cristianas hasta el punto de regalar a la Iglesia nuevos rostros con rasgos amazónicos. nº7.
El camino de la REPAM sigue, porque los sueños de Dios y de los hombres continúan y la esperanza de los pueblos nunca muere: habrá un día en que todos al levantar la vista veremos una tierra nueva, con hombres y mujeres nuevos, más misioneros, más fraternos, más solidarios, más proféticos. Seguimos tejiendo la red y obedeciendo al maestro, ”echad las redes mar adentro” caminamos hacia aguas más profundas, escuchando a nuestros pueblos en sus territorios, construyendo un mundo mas justo y humano, una naturaleza mas limpia y unos aires y unos ríos mas trasparentes.
Solo nos queda felicitar a todos los que estos años de vida de la REPAM han colaborado con su granito de arena, con su ánimo y su oración, con su reflexión y sugerencias, el discernimiento siempre estará abierto para mejorar cada día este servicio eclesial y que en esta etapa presente esta llevando adelante para hacer realidad las conclusiones del Sínodo Amazónico tarea pendiente. Que el Dios de la sabiduría les ilumine y les bendiga.