El viernes 26 septiembre celebrábamos el día del adulto mayor con los ancianos.
El Sr.Obispo Mons. Rafael Cob García, indicaba el día con la eucaristía en el asilo Mons. Tomás Romero Gros, junto con la comunidad de hermanas misioneras y empleados del centro que atienden a los ancianitos.
Les recordaba que en este día en que la sociedad vuelve los ojos a este grupo humano que ha llegado a la tercera edad después de haber dado lo mejor de su vida en favor de su familia y del progreso de su país, muchos de ellos se encuentran sufriendo la soledad y la marginación por la indiferencia de tanta gente que pasa de largo ante la necesidad de los ancianos.
Por otra parte escuchábamos que la palabra de Dios nos recuerda que para Jesús los pobres y marginados son los primeros que hay que prestar atención, los más vulnerables, como Él lo hizo.
Hoy queremos felicitar a estos hombres y mujeres de la tercera edad y decirles: ¡Ánimo! Dios esta con nosotros, Él nunca nos abandona, es consuelo y esperanza para todos.
!Ánimo¡ porque ustedes tienen un tesoro que otros no tienen, la sabiduría de la experiencia, del camino recorrido hasta hoy, con el cual podemos ayudar compartiendo y escuchando al mundo de hoy, que tanto necesita de consejo y de paz. Agradecer hoy también a los que cuidan de estos hermanos y hermanas ancianos para que su entrega en el trabajo lo hagan con cariño y con mucha paciencia siendo conscientes de las limitaciones que tiene el anciano.
Después de la misa el Sr. Obispo se trasladó al centro de la tercera edad Betania, donde alrededor de 60 personas hombres y mujeres son atendidos por este proyecto social del Vicariato Apostólico de Puyo .Igualmente les felicito en este día y les animó hoy, a dar gracias a Dios por la vida que nos sostiene y por la compañía y atención que recibimos en el centro, así como el sentirnos útiles en la sociedad compartiendo desde la experiencia con los compañeros y compañeras con las que nos encontramos aquí, vencer cada día la soledad y la tristeza y ocupar nuestro tiempo siempre para el bien.
También agradeciendo a los que se preocupan de nosotros para hacernos la vida mas agradable cada día, igualmente les compartió la buena noticia del Sínodo Amazónico en el que participará el mes de octubre en Roma para junto con el Papa y los obispos de la Amazonia reflexionaran sobre el cuidado de la naturaleza y la tierra donde vivimos que es nuestra casa común, así como evangelizar mejor salvando las dificultades que hoy encontramos para que la buena noticia de Jesus en el evangelio llegue a todos los pueblos. Y les pidió oraciones para los frutos de este Sínodo.