MISIONEROS ECUATORIANOS CON CORAZÓN SINODAL
Llegamos un año más a la celebración del misionero Ecuatoriano Ad-Gentes y nos recuerda que un día del año 2015 la Asamblea General Plenaria de los obispos del Ecuador , declaró el 12 de junio como día nacional del misionero ecuatoriano Ad-Gentes, poniendo como patrona de los misioneros ecuatorianos, a la ecuatoriana Beata Mercedes de Jesús Molina, fundadora de la Congregación de las Marianitas, quien llegó como primera misionera ecuatoriana a los territorios de Misión en la Amazonia del Ecuador.
Hoy queremos recordar a las valientes misioneras y misioneros que como ella, han salido a los territorios de misión para llevar la buena noticia del evangelio a los mas necesitados del mundo.
La Iglesia que como nos recuerda el Concilio VT.II, por naturaleza es misionera hoy sigue escuchando y haciendo realidad el mandato de Jesús primer misionero del Padre, “Id por todo el mundo y llevad el evangelio a todos los pueblos” Mc.16,15,
En este año de preparación del Sínodo convocado por el Papa, todas las jurisdicciones eclesiásticos en el mundo entero han escuchado al pueblo de Dios que lo conforman todos los bautizados en Cristo quien nos invita a una profunda conversión misionera , saliendo de si misma para como nos recuerda el Papa, anunciar con la vida del amor gratuito y salvífico de Dios siendo todos hermanos y hermanas.
Es el misionero quien mejor muestra su corazón sinodal, cuando dedica su vida a caminar unido con su gente como pueblo de Dios, quien entrega su vida y su tiempo para anunciar y escuchar lo que el Espíritu inspira a su pueblo.
400 años han pasado desde que en 1622 nació la Congregación de Propaganda Fide para apoyar a las Iglesias en los territorios de Misión coordinando el trabajo misionero de la Iglesia y animando el anuncio del evangelio, manteniendo siempre encendido el fuego de la misión ad-gentes.
Este año ha sido también celebrativo, cuando en el mes de mayo pasado en Lion se celebraba la Beatificación de la joven Pauline Marie Jaricot, un ejemplo vivo de una gran mujer misionera, por su valor audaz y su creatividad generosa, fundadora de la Obra de la propagación de la fe y el DOMUND, como nos dice el Papa Francisco, con una respuesta compasiva y misericordiosa de Dios.
Creo que nuestros misioneros ecuatorianos ad gentes presentes en distintos continentes del mundo y en los territorios de Misión, como dice el Papa, ayudan a abrir en cada Iglesia particular los horizontes de una Iglesia universal.
Hoy queremos aplaudir su disponibilidad en el servicio, su generosidad en la acción.
y su caridad con los más necesitados, con un corazón lleno de ardor misionero al estilo de Francisco Javier y apasionado como el de Santa Teresita desde la oración.
Comunión, participación y Misión son las claves para vivir este tiempo presi nodal de la Iglesia .Nos sentimos unidos en comunión con nuestros misioneros ecuatorianos ad-gentes allá donde se encuentren, como Cristo pedía en su oración sacerdotal” que todos sean uno para que el mundo crea que tú me enviaste”Jn.17,21. Nosotros pedimos también al Padre común que nos queramos como hermanos , con un mismo sentir y un mismo querer, no dejando entrar al enemigo que siembre la división.
Participando de las alegrías y las penas de sus vidas y las de sus iglesias particulares, como miembros de un mismo cuerpo que todos comparten y participan, ellos son nuestra alegría y nuestra preocupación, todos miembros activos y participativos de la evangelización en el mundo.
Siempre misioneros, siendo una Iglesia en salida hacia las periferias existenciales que nos rodean, cerca o lejos, donde está el necesitado o abandonado, el triste o desconsolado. para ser el misionero que lleva la luz de la palabra a la oscuridad del pecado, que lleva pan al hambriento agua al sediento que acoge al peregrino y es compañía en la soledad.
Misioneros de la escucha y el anuncio, misioneros sinodales, que juntos caminan con el pueblo y se hacen pueblo de Dios en marcha.
Que la Virgen María de la Visitación nos lleve a visitar como ella, evangelizando con alegría.