Con alegría en el corazón y gratitud profunda, hemos culminado una semana llena de fe, encuentros, oración y servicio en nuestra parroquia San José de Canelos.
Agradecemos a todos los misioneros que nos acompañaron y a cada persona que abrió su hogar, su corazón y decidió decir sí a la misión de Jesús.
Hoy cerramos esta hermosa experiencia con una gran celebración: 84 jóvenes y adultos recibieron el sacramento de la Confirmación, fortalecidos por el Espíritu Santo y enviados a ser testigos valientes del Evangelio.
Gracias a Monseñor Rafael, por su cercanía y por presidir esta eucaristía tan significativa para nuestra comunidad.
¡La misión no termina aquí! El Espíritu sigue soplando fuerte en nuestros barrios, en nuestras familias y en cada corazón dispuesto a amar y servir.