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LA IGLESIA PROFETICA DE LA AMAZONIA DENUNCIA EL MAL CON VALENTIA

abril 30, 2020

Acabo de escuchar y leer las intervenciones de mis hermanos obispos el día de ayer, Mons. Adalberto Jiménez y Mons. Celmo Lázari de los Vicariatos de Sucumbíos y Aguarico así como de otras personas que luchan por la vida en nuestra Amazonia. presentando la demanda y petición de medidas de protección ante el gobierno ecuatoriano y las empresas responsables de este desastre ecológico que ha provocado el derrame de petróleo de más de 15.000 barriles sobre los ríos Coka y Napo.

Las cifras que nos dan son para hacernos temblar, cerca de 120.000 personas afectadas, en 105 comunidades, un rio de muerte envenena la fauna de nuestros ríos y la flora de sus riberas.

Como representante de la REPAM en Ecuador, quiero manifestar una vez más mi solidaridad con ellos y con los que sufren el dolor y la injusticia, la discriminación y la destrucción de su hábitat, con la contaminación del líquido vital el agua, elemento imprescindible para la vida humana.

Ciertamente es inaudito hasta dónde llega la falta de sensibilidad de los que no quieren ver y de los que no quieren oír. Pero la voz profética de la Iglesia se a hecho escuchar y como dice Mons Adalberto” seria un pecado de omisión por parte de ella sino denunciara las consecuencias de muerte de este desastre ecológico que esta sufriendo nuestra Amazonia.

Una vez más los derechos de los pueblos originarios y guardianes, de la Amazonia como dice Mons. Celmo, han sido violados y nuestra tierra vuelve a sufrir la herida profunda de la contaminación, producto del extractivismo y de la codicia de unos pocos que se enriquecen sembrando muerte para muchos a costa de los pobres que ni siquiera las migajas de la mesa les llega para sobrevivir.

Cuando nos disponemos a celebrar en este mes de mayo florido, el Vº aniversario de la encíclica “Laudato Si” del Papa Francisco, gran regalo para el mundo, lección para aprender todos, como urge cuidar la casa común de nuestro planeta tierra. Cuando parece llover sobre mojado, desgracia tras desgracia ante la pandemia coronavirus, llega este desastre ecológico en nuestra Amazonia, y que haya gente como decía nuestro hermano obispo, que quieren hacer invisible lo sucedido, los Medios de comunicación quisieron quedarse mudos no dando publicidad a estos hechos o sentirse aliados de los que quieren hacer callar la voz de los pobres que sufren.

Pero el mundo ha conocido y escuchado el grito de los discriminados, ante los hechos que se ven sobran las palabras, Hablábamos semanas atrás, de una pascua roja y negra, el luto negro del petróleo llega contaminando aguas abajo hasta el rio Amazonas y hasta el mar Atlántico como arma de muerte. Mas la sangre roja derramada por Cristo en la cruz quiere purificar nuestras mentes y nuestros corazones para despertar el compromiso de la defensa de la vida en la Amazonia, pulmón de la humanidad, paraíso de belleza y biodiversidad inigualable, la que un Dios nos regaló como tesoro que hay que cuidar y la vida que hoy nos pide defender .

Como nos dice el Papa Francisco en Querida Amazonia, debemos vivir la profecía de la contemplación. “muchas veces dejamos cauterizar la conciencia, porque la distracción constante nos quita la valentía de advertir la realidad de un mundo limitado y finito…el ser humano se las arregla para alimentar todos los vicios autodestructivos; intentando no verlos ,luchando para no reconocerlos postergando las decisiones importantes, actuando como si nada ocurriera·” (nº53 Querida Amazonia)

La REPAM decía Mons. Adalberto nos ha mantenido unidos para trabajar al lado de los pueblos amazónicos , somos hormigas al lado de estas multinacionales mineras y petroleras” Si amigos nos pueden parecer gigantes , pero David también era pequeño ante el gigante Goliat y la pequeñez venció al gigante , como diría el Quijote ante la pregunta de su escudero Sancho: .”¿Cuándo saldremos de este encantamiento que nos tiene encerrados en castillos y no nos dejan andar por los caminos ?“ No lo sé Sancho, pero cuando salgamos ya no habrá gigantes que se nos resistan”

Sigamos hermano unidos, esta es nuestra fuerza, que Dios en este mes de mayo de florida primavera no dejemos de contemplar la belleza de nuestra Amazonia, para forjar también la belleza de la fraternidad, de la REPAM y de nuestra Iglesia amazónica.

Cristo resucitado ha vencido a la muerte y quiere que todos vivamos la VIDA . Aleluya