No es la primera vez que la REPAM entra en la ONU en Nueva York, para respaldar como Iglesia a los pueblos indígenas de la Amazonía, los pueblos indígenas en el Sínodo Amazónico celebrado en Roma en el 2019, pidieron que la Iglesia fuera su aliada del caminar de los pueblos indígenas y en la defensa de los derechos de los pueblos en la Amazonía. En esta ocasión la REPAM presentaba hoy el segundo informe de Derechos Humanos vulnerados en los pueblos amazónicos, como lo hará después en Washington en la OEA.
Encabezados por el presidente de la REPAM Cardenal Pedro Barreto, Mons. Rafael Cob García, vicepresidente y representantes del Núcleo de derechos humanos en la REPAM P. Piter Hugles, Coordinador de Derechos Humanos, Sonia Olea de Cáritas Internacional de España y Liy Calderon, representante del Núcleo de derechos humanos de la REPAM en Perú, llegábamos la tarde noche del martes, a la ciudad de Nueva York, donde fuimos acogidos como en familia en la casa de los Hermanos de Maryknoll.
Esta bella ciudad que nos recibió como pascua florecida por una primavera que embellece los jardines de sus calles. La ciudad de los rascacielos, donde la vista se pierde en la altura, queriendo contar los pisos de sus soberbios rascacielos que se elevan como altas torres desafiando a las nubes de su cielo.
Después de recoger en la mañana las credenciales para pasar los rígidos controles en los espacios y estructuras con que cuenta la ONU, para participar estos días en el foro mundial de los pueblos indígenas que se celebra aquí.
No faltaron reuniones con distintos niveles y personas que trabajan en favor de los derechos de los pueblos indígenas y de los más vulnerables de la tierra. En la sede de las congregaciones religiosas acreditadas ante la ONU pudimos encontrarnos con el Relator General de la ONU sobre los derechos de los pueblos indígenas, Dr. Francisco Cali fue un encuentro muy familiar y emotivo, allí además de escucharle, le dimos como reconocimiento de su trabajo en favor de los derechos de los indígenas, un presente que simboliza la bonita vidriera que recoge los logotipos de la REPAM y del Sínodo Amazónico, copia del vitral que esta colocado en la catedral de Puyo, él emocionado agradeció este gesto.
En la tarde del segundo día, pudimos participar en el foro, escuchando a varios indígenas representando a los distintos países del mundo, entre ellos escuchamos a una representación del Ecuador. Al día siguiente tuvimos en la sede de las congregaciones religiosas el informe virtual de los derechos vulnerados en la Amazonía presentado por la REPAM en la ONU, que coordinó Lily Calderón con la participación de distintos actores de diferentes países, donde se han vulnerado los derechos de los pueblos amazónicos, entre los que están Ecuador, Colombia, Perú y Brasil.
En días posteriores pudimos tener encuentros con el Presidente del Foro mundial de pueblos indígenas Dr. Carlos, junto con Lourdes Tiban y otros representantes de países que están en el foro, muy interesados por el informe de la REPAM, pidieron que el Papa pudiera enviar unos documentos para la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas en este foro, y si fuera posible encontrase con el en el próximo viaje que piensa hacer a Canadá.
Igual también esa tarde, nos recibió la Secretaria General Especial sobre la prevención de Genocidios, Alice Wairimu Nderitu, así como también otros representantes que trabajan en el Consejo de Seguridad en la ONU.
Finalmente como cerrando está gira en Nueva York, tuvimos un encuentro y almuerzo con el Nuncio del Vaticano en las Naciones Unidas.
Una apretada agenda que fortaleció el espíritu de esta Red Eclesial Amazónica, reconocida en la ONU por su trabajo eficaz a nivel del medio ambiente y el cuidado de la casa común, preocupación también de la ONU y como nos dice el Papa Francisco en su encíclica Laudato Sí, los mejores guardianes de está casa común han sido los pueblos indígenas. Y en su Exhortación de Querida Amazonía, nos invita a soñar y hacer realidad estos sueños: social, cultural, ecológico y eclesial.
Como gran impulsor de este trabajo que realiza la REPAM desde el 2014 que fue reconocida oficialmente por la Iglesia nos anima cada día a caminar juntos para construir una Iglesia más misionera, fraterna y SINODAL, guiados por el mismo Espíritu que nos inspira hacer un mundo más humano y menos violento, sembrando la paz con nuestro testimonio.
Esperamos que la segunda parte de esta gira que hace la REPAM en Washington, también sea un éxito en las gestiones ante la OEA como ha sido en la ONU en Nueva York.